El bordado de la capa procesional de la Virgen del Carmen se inició en la ciudad de San Fernando el once de Noviembre de 1889 dándose por concluido el once de mayo de 1891.
Los trabajos, dirigidos por la Srta. Dña. Leonor Almeyda, fueron ejecutados virtuosamente por un total de cuarenta señoritas, cuyos nombres aparecen recogidos en un manuscrito que depositaron en el interior de la capa al finalizar los trabajos.
Aunque se desconoce al autor del diseño ornamental, éste se enmarca dentro del más puro estilo romántico, destacando la sinuosidad y dinamismo de sus líneas, así como la armonía y equilibrio que rige la composición.
Se ornamentó mediante la técnica del “bordado en oro a realce” empleándose como soporte base un tisú de plata de gran calidad.
Asimismo, a lo largo de todo el perímetro exterior se dispuso un artístico remate, a modo de cenefa, compuesto por pequeños escamados de lentejuelas con forma de caracolillos, en cuyo extremo inferior iban fijados los flecos que remataban finalmente la capa.
Cabe apuntar que el momento en que se realiza esta destacada pieza del Patrimonio Textil isleño, la Virgen procesionaba en el paso de templete, por lo que se entiende que la capa se concibió con unas dimensiones y morfología adaptadas a las referidas andas.